La iniciativa de la creación de la escuela la tuvieron tres personas: Don Alberto Melgratti, Don Fortunato Guzmán y Don José “Tito” Vittar. A parte de que todo el barrio veía la sentida necesidad de la creación de la unidad educativa.

 Luego se fueron sumando a esta iniciativa varias personas como ser Apolonio Guzmán (padre de la primera docente), Don Alberto Esperguín y otros que veían el peligro de los trenes que estaban parados en las vías horas y horas, ocasionando graves problemas.

Una vez dado el primer paso, vino una persona de Resistencia de la Dirección de Educación de apellido Peralta, que tenía muy buena amistad con Don Vittar y colaboró mucho para la creación de la escuela.

Para que los vecinos se interesaran aún más por la creación se realizaron visitas domiciliarias a los vecinos levantando firmas. De esa manera se hizo como si hubiera sido una reunión. Al principio fue así; después hubo muchas reuniones; vinieron gente del Consejo General de Educación y lógicamente que hasta que se concretó hubo muchos cabildeos.

 La primera reunión formal se llevó a cabo en el local de Don Alberto Melgratti con un grupo de vecinos y gente de Presidencia Roque Sáenz Peña y Resistencia que tenían la gran inquietud y de ahí nace la iniciativa de formar la Comisión “Pro-edificio” quedando integrada por José Vittar, Alberto Melgratti, Isabel de Dorado, Alberto Esperguín, Apolonio Guzmán, Amanda Guzmán y otros. Pero luego las reuniones se hacían del Fortunato Guzmán por el hecho de que Don Vittar tenía en funcionamiento un aserradero muy grande, por lo tanto había mucho movimiento de ese lado y por ello era dificultoso concurrir allí. Ese fue el único motivo, pero cuando vinieron las autoridades de Consejo de Educación arribaron a la casa de Vittar directamente, porque fue él quien dijo que aportaría con las cosas necesarias para que la escuela funcione. Económicamente, fue quien puso el edificio y el material necesario para las aulas.

Cabe destacar que en esta primera reunión se decidió solicitar la creación de la escuela con la urgencia que el caso requería. Se insistió mucho sobre eso hasta que el Consejo de Educación envió a alguna autoridad para estudiar y sobre todo hacer la estadística de la cantidad de alumnos que podían concurrir.

También se realizó el pedido de un docente y lógicamente que la comunidad se comprometía a aportar con los bienes materiales, pero se solicitaba que se designe los maestros que sean necesarios.

Don Martín Guzmán cuenta que “a raíz de la situación de aquella chica, se agravó la situación de la que ya veían. A nosotros, nuestras madres iban y nos esperaban en la vía para hacernos cruzar porque el tren se ponía a lo largo del pueblo, entonces ocurría que algunos cruzaban por debajo del tren y algunos pasaban por arriba; pero cuando se pasaba por arriba había peligro de poner el pie en la collera del tren y que al moverse lo aplaste: pasando por debajo al moverse el tren se podía pegar un fuerte golpe. Entonces ese peligro del tren había que eliminarlo, había que hacer una ESCUELA de este lado, en el Barrio Sur”.

Por el año 1.960, Don Fortunato Guzmán que ya habitaba esta zona, Don Tito Vittar y Don Alberto Melgratti decidieron levantar firmas en el barrio para pedir la creación de la escuela.

La situación económica por la década del 60 era crítica, tanto es así que por el año 1.962 el pago del sueldo a la administración pública estaban atrasados un año y meses. Por lo tanto, no había recursos para crear la escuela.

Es por ello que Don Tito Vittar dijo “yo voy a poner el local y las cosas que sean necesarias como ser: pizarrones, algunos bancos y sillas para que se cree la escuela. Y así fue, Don Vittar montó un salón e hicieron bancos  de madera en el aserradero de su propiedad, hicieron los pizarrones y el gobierno debía designó la docente. Así comienza a funcionar por el año 1.960 la Escuela N° 110.

La escuela comenzó a funcionar en ranchos de obrajes pertenecientes a Don Tito Vittar, una era de adobe (que existe todavía), otra de ladrillo y otra de maderas amachimbradas de quebracho blanco, los techos eran de chapa de cinc y algunas tenían costaneras aserradas como cielorrasos, construidas por los mismos empleados. Dos aulas estaban juntas y otra separada con un patio muy chico, lo cual era demasiado incómodo.  

La directora vivía en una habitación que tenía costaneras rústicas, techo de  pasto, tierra y por último chapas. Después se hizo una ampliación hacia el Sur con más comodidades y más patio, esto a fines de 1.960.

LA PRIMER MAESTRA - DIRECTORA

La señora Celia Guzmán nació en la localidad de Las Breñas (Chaco) y sus padres fueron Beatriz Barreras y Apolonio Guzmán. Inicia sus estudios primarios en la Escuela Nacional N° 111. Luego viaja a Presidencia Roque Sáenz Peña donde comienza sus estudios secundarios en el Colegio Misericordia de carácter religioso. En aquellos años la carrera de magisterio abarcaba cinco años: tres años de teoría y luego dos años de orientación que equivale a práctica y residencias en la actualidad. Al recibirse en el año 1.955 regresó a Pampa del Infierno porque sus padres continuaban viviendo allí.

Profesionalmente se inicia en la Escuela N° 111 en 1.956 hasta 1.959. El Director de esta escuela era el Señor Diorio quien le comenta a la Sra. Celia que se abriría una nueva escuela  y pensó en ella como para darle la posibilidad de hacerse cargo de ese establecimiento. Los padres no estaban muy de acuerdo debido a que estaba del otro lado de la vía y tendría que cruzar por entremedio de los vagones, además era lugar casi desértico, pero a pesar de ello aceptó el cargo.

En 1.960 se presentó a trabajar con un telegrama de su designación, en un edificio precario que pertenece a Don Vittar. A los pocos meses se sumó el Señor José Osvaldo Maffey como maestro.

En 1.961 contrae matrimonio con Libio Valenti con quien tuvo dos hijos: Mónica y Gerardo.

Luego su esposo es trasladado a Roque Sáenz Peña y ella solicita también su traslado, pero fue ubicada en la Escuela N° 130 de Villa Sarmiento de Resistencia allá por 1.965.

Al egresar de la Escuela N° 110 queda como Directora del Establecimiento la docente Olga Valussi. Luego en 1.968 recién consigue su traslado a Sáenz Peña pero va como Directora Titular de una escuela.

Su trabajo continuó cumpliendo entre funciones directivas, de Supervisora y de Directora Regional. Logra su jubilación en julio de 1.985 y se arraigó definitivamente en Presidencia Roque Sáenz Peña.